La tendera de la esquina

Casi suena a película porno (incluso, le sacaría el "casi"). Bien, os comento que hace como un año pusieron una tienda de estas de pueblo que abren todos los días, en la esquina de la calle donde vivo. Venden de pan y empanadas a fruta, verduras, detergente, lejía, carbón para barbacoas. Bueno, de casi todo. Como me pilla a dos pasos de casa suelo pasarme bastante aunque a veces no tienen lo que necesito y acabo yendo a un DIA que hay a unos 700m cuesta abajo (y después cuesta arriba, cargada).

Que estoy preparando unos espaguetis de muerte y me falta la nata, pues voy. Que le estoy preparando la comida al niño y me falta unas zanahorias, pues voy. Que me quedo sin papel higiénico, pues voy. Que tengo que bañar a los perros y no tengo suficiente jabón, pues voy. Que necesito ciruelas porque a Peque le encantan merendarlas, pues voy. Pero de esto a lo mejor tienen la mitad, y son cosas que contaba con ellas pero no tiene. ¿Qué hago? Pues al final, al hacer una compra grande ya cojo todo lo necesito y si después necesito algo más, pues me voy dando un paseo hasta el DIA. Pero gasto si le  hacía, no los 70 € semanales de mis padres pero si unos 30€ mensuales.

Hasta aquí todo ha sido paja (texto sin ir a ningún lado), ahora bien. Mis padres le hace un gasto cuantioso todos los días, ya el pan tanto para ellos como para la abuela lo cogen ahí, más fruta y verdura y cosas que necesitan. Yo un día fui a por un par de zanahorias que me hacían falta, a veces había cogido una bolsa pero al final acababan la mayoría arrugadas o con moho, así que, prefería coger dos, y cuando me hicieran falta pues otras dos o las que necesitara. Y no va la tendera y se queja a mi padre de que sólo le cogía dos zanahorias al mes. ¡Pero será hija de su madre! Y no quedó ahí la cosa, que después se le estuvo quejando de que nos paseábamos con las bolsas del Mercadona por delante de la puerta de su tienda. Yo ya flipaba en colores. ¿Cómo voy a pasar por delante de tu tienda con las bolsas del Mercadona, alma cándida? Si del coche a casa no pasamos por delante de tu tienda y además, las bolsas del Mercadona hay que pagarlas y preferimos llevarlas de tela y grandes. Y no sólo eso, ¿cómo sabía ella que íbamos al Mercadona comprar y no al Carrefour o al Eroski?

Se lo dije a Papá y quedamos en no volver, y durante un tiempo lo cumplimos. Además, la tía es una cotilla de mucho cuidado, se aburre muchísimo y cada dos por tres le venían las "amas de casa-cotillas" a sentarse delante de su tienda, con ella para cotillear y después querían meter a las que íbamos sólo a comprar en sus faenas. ¡Quita, quita! Además, se ponía a fumar por varias veces al día delante de la tienda, donde tenía las cajas de frutas y verduras. Y más de una vez, pretendió engatusar a mi padre (que está en el paro=mucho tiempo libre) y por su culpa mis padres tuvieron unas discusiones descomunales.

Pero llegó el niño y a veces necesitaba alguna cosilla que otra que por no alejarme mucho de casa con el pequeño pues prefería cogérsela a ella que estaba al lado. (¡Qué vaya! ¡Me comí mi orgullo! Y ella se lo merendó). Y bueno, de vez en cuando le cojo fruta, verdura, y otras cosas en concreto. Y ¡qué además es muy cara! Un día me ofreció unas cerezas por 4€ y pico el quilo y yo las acababa de ver del mismo proveedor a mitad de precio en el DIA, y me sacó la hoja de precios para enseñarme lo que le valían a ella y a cuanto lo ponía. Y yo, pues vale. Pero yo elijo dónde comprar, ¿no?

Pues el otro día fui a cogerle una empanada y me dice "tengo calabacín para ti", y me quedo mirándola "que mi marido me dice que vienes a por él y no lo tenemos, y ahora que lo tenemos haber si te vas a quedar sin él". Es decir, que me estaba diciendo que se lo comprara. Y ¿qué hago? Ya había comprado hacía dos días, cuando me dijo que no pedían calabacines, tres. Pues ahí le quedó. Al día siguiente, me viene mi padre de intermediario para darme las quejas de la tendera.

También me enteré de que echó a un cliente de la tienda porque pasa todos los días con la barra de pan que coge en el centro, y le echó por no hacerle el gasto a ella. Pero bueno, ¿qué pasa? ¿Tenemos que comprarle a ella un pan que no queremos? Y ¿si nos gusta más el otro o es más barato o lo compramos de todas la vida? Pues hala, echó al hombre de su tienda y le "advirtió" que no volviera a entrar.

Y además de todo lo anterior, hace algo que me repatea, más bien, que dice: Cada vez que habla con un cliente sea habitual o no, le dice de coletilla "alma mía", "querido mío", "cariño mío", "mi amor",...

Y ¡no os lo perdáis! Tiene un cliente que es muy bueno (que compra mucho), es el que le vende los huevos caseros pero tienen que ser los huevos que él quiera, no le vale que ella los pida. Y además, les da órdenes, "¡TENDERA! ¡TE HE ORDENADO QUE LOS CLIENTES NO COJAN LA FRUTA CON LAS MANOS!" Esto lo dijo delante de una buena clienta que estaba cogiendo la fruta para llevársela.

Yo sigo igual, compro lo que necesito, la cantidad que yo quiero y como la quiera. Me da igual lo borde que se ponga porque el problema es suyo, no mío. A mí me saca las castañas del fuego y listo.

¿Os ha pasado algo parecido? ¿Qué os parece?