martes, 15 de julio de 2014

Relato de una caída

Estaba yo tan tranquila sentada en el sofá, trabajando un poco en el blog cuando Peque se cansó de jugar con sus juguetes y decidió ir al juguete grande Mamá (léase, ordenador), pues el pequeño aunque le gustaba tanto como el grande, era más difícil de encontrar (el móvil).

Ahora, gateador experto, se puso en un instante a mi lado, escalo por la mesita de café y ya estaba a mi lado, de pie, aporreando las teclas del portátil.
-¡No, Peque, no! ¡Haces pupa al ordenador! -Le decía y por más que el pobre el ordenador se quejara pegando pitiditos Peque seguía concentrado en su faena.
Lo subí al sofá, a mi lado, le coloqué su piano y estuvo un rato entretenido, hasta que decidió volver con el juguete grande de Mamá, se colocó a mi lado, con suficiente sofá por todos los lados, pegó un salto para atrás enfurruñado y se cayó de espaldas al suelo. Cuando quise echarle la mano ya volaba por los aires, la cabeza le rebotó en el suelo e inmediatamente se echó a llorar. Lo cogí con cariño y fui a cambiarle el pañal, pues sabía que tenía muchísimo sueño, y sin más dejó de llorar. Eso me puso en alerta, ¿es este el síntoma de extraña conducta que advierten los expertos cuando realmente ocurre algo?

Como si se me fuera la vida en ello, empecé a llamar a un montón de expertos en la rama de sanidad, así como, a otras mamás. Una amiga de la familia, médico, me dijo que lo llevase a urgencias que era mejor que me dijeran ellos si tenía sueño por la siesta o el golpe. Pero ¿cómo iba a hacer? Era pleno mediodía, hasta aquí no llegaban los bueses, huelga decir que estaba sola, sin coche, sin vecinos. Salí a la calle llorando con mi bebé que reía entre mis brazos y un vecino que llegaba de trabajar se ofreció a llevarnos a urgencias.

Ni chichón, ni dolor, ni nada de nada. Peque le reía a las pediatras y a las enfermeras, sólo se puso a llorar cuando empezamos a desnudarlo. Lo pesaron, bebé de 10 meses y medio con 11,2000 kg. Ya decía yo que pesaba un poco. Una revisión sencilla, algunos consejos y para casa, gracias a un tío carnal que también estaba preocupado.

Una siesta de tres horas durmió, y el bicho feliz y contento despertó.




Y hasta aquí el relato. Insistieron mucho que si había perdido el conocimiento o había vomitado porque era malos presagios. Es importante que si se lleva un golpe tremendo en la cabeza, no dejar que duerma hasta que os lo vea un médico.

Conclusión: lo que me había alarmado era que había llorado muy poco cuando en realidad, había llorado poco porque no le había dolido. Pero a veces es mejor molestar un poco que después lamentar.

20 comentarios:

  1. Hola jolín tuviste que pasar un poquito mal, sobre todo por el rollo de no tener coche para llevar al niño a urgencias. Me alegro de que no fuese nada y en mi opinión hicistes muy bien en llevarle al médico.

    besitos

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    1. El no tener coche me limita muchísimo, hoy me gustaría bajar a la ciudad a mirarle la ropa para la boda que tenemos a final de mes pero a partir de las 10 las temperaturas ascenderan hasta llegar a 35 grados a las cuatro de la tarde y casi que prefiero quedarme en casa.

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  2. Menudo susto que te llevaste! Menos mal que no fue nada, pero you estoy completamente deacuerdo contigo. Prefiero pecar de exagerada a luego tener que lamentarme...

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    1. Fue lo que me recomendaron y yo seguí.

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  3. uff menudo susto! yo hubiese actuado igual y hubiese ido al médico. Me alegro de que no fuese nada, bss!

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    1. Y nosotros, y no será por golpes jajja

      ¡Gracias por tu visita! ^^

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  4. Uff, de estas también hemos pasado nosotros y a mi también me ha entrado la paranoia. Sobretodo cuando aprendía a andar y se daba algún golpe que veía que no era importante pero luego le entraba sueño.. menuda rallada que me entraba con si sería por el golpe, así que hiciste bien yendo a urgencias, más vale prevenir.
    Suerte que fue sólo un susto

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    1. Es que es preocupante, ¿tiene sueño porque le toca dormir o por el golpe?

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  5. Vale, no fue nada, pero yo... también lo hubiera llevado a urgencias! en esos casos, tras un gran golpe en la cabeza, lo mejor es que lo valore un pediatra, que es el que sabe, si él dice que no es nada, pues para casita más tranquila y listo ;)

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    1. Sin duda, más tranquila me quedé

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  6. Uff, menudo susto!! Me alegro que no fuera nada. Hiciste bien, es mejor pecar de exagerada y quedarse tranquila después de que lo valore unj pediatra. Con los niños no podemos arriesgar. Menos mal que están hechos de goma!! Un beso!

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    1. ¡Ni que lo digas! Eso fue lo que me dijeron, que le rebotó la cabeza en la dura baldosa por ser de goma y no le dolió nada, sólo fue el susto y por eso dejó de llorar tan rápido

      ¡Gracias por tu visita! ^^

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  7. Vaya susto! Sagutxu tampoco para y en uno de esos golpes se cargó una tecla del portátil... Me alegro de que no fuera nada y esté bien, yo hubiera hecho lo mismo. Por cierto, siesta de 3horas? Madre mía!! Besos

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    1. Si, sí. De tres horas, habíamos atrasado la siesta y cada vez fue acumulando más y al final, salió de tres horas, de cinco a ocho de la tarde, por la noche se quedo dormido a las once.

      ¡Gracias por tu visita! ^^

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  8. Realmente con esos golpes, no ganamos para sustos! y pensar que es solo el comienzo. Me alegra que esté bien, al final de todo. Un beso grande.

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    1. Es cierto, pensar que es sólo el principio de una gran odisea.

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  9. Desde que sabe sentarse, la bichilla se lleva algún que otro porrazo en la cabeza porque se inclina demasiado hacia atrás y para mí que ese enorme peso la descompensa. Mi madre siempre insiste en que nada de dormirse después de un golpe (y eso que los de esta son más bien ligeritos), pero es verdad que no se puede uno fiar cuando son tan pequeños.

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    1. Si es que hay que ponerles cascos, rodilleras, y coderas hasta para dormir.

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  10. Uffffffff qué sustazo!!! hiciste bien en llevarlo a urgencias para quedaros tranquilos...cualquier día morimos de un susto de estos.

    Besossssssssss

    PD: por cierto tienes que actualizar mi URL (si quieres, claro) veo que tienes la de blogger aun ;)

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    1. Ahora voy que me había olvidado por completo, jejej

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